El agua es uno de los elementos más preciosos de la Tierra, esencial para la vida y el bienestar. Sin embargo, su valor trasciende más allá de la hidratación. En Ohra, nuestra agua no es solo un recurso vital; es agua estructurada, pura en su origen y organizada en su estructura molecular, lo que la convierte en un canal de energía y vitalidad. Esta es la esencia de Ohra: un agua que conecta con la naturaleza, el orden y la fluidez de la vida.
¿Qué es el Agua Estructurada?
El concepto de agua estructurada hace referencia a un estado en el que las moléculas de agua se organizan en patrones específicos, formando una estructura ordenada, en lugar de su distribución aleatoria habitual. Este estado ordenado de las moléculas es fundamental para la capacidad del agua de transportar energía, nutrientes y mensajes a nivel molecular, lo que resuena profundamente con la visión de Ohra sobre la pureza y el poder natural del agua.
Masaru Emoto, uno de los pioneros en investigar el comportamiento del agua, observó que el agua no es solo un disolvente pasivo, sino un medio que puede almacenar y responder a la información. Según Emoto, las emociones, los pensamientos y las palabras pueden afectar la forma en que las moléculas de agua se organizan. En su famoso trabajo Los Mensajes del Agua, Emoto demostró que el agua expuesta a palabras de amor y gratitud forma cristales hermosos y simétricos, mientras que el agua expuesta a palabras de odio o violencia forma cristales desordenados y caóticos.
Este fenómeno va más allá de la simple observación estética: nos muestra que el agua tiene la capacidad de almacenar información, una propiedad que está en el corazón de nuestra misión en Ohra. Creemos que el agua debe conservar su estructura más pura, libre de contaminantes, para que pueda nutrir no solo nuestro cuerpo, sino también nuestra energía interna.
Gerald Pollack y el Agua de Cuarta Fase
Otro científico que ha investigado el agua estructurada es Gerald Pollack, profesor de bioingeniería en la Universidad de Washington. Pollack ha propuesto que el agua, en presencia de superficies hidrofílicas (como la piel o las membranas celulares), puede organizarse en una estructura ordenada que él denomina agua de cuarta fase. Esta forma de agua no es ni líquida ni sólida, sino un estado de orden estructural que tiene propiedades únicas y que podría jugar un papel esencial en procesos biológicos.
La teoría de Pollack resuena profundamente con Ohra, pues la estructura organizada del agua permite una circulación más eficiente de energía en el cuerpo, lo que mejora la absorción de nutrientes y el funcionamiento celular. De hecho, esta forma de agua estructurada podría ser más eficaz para mantener el equilibrio del cuerpo, optimizando el transporte de oxígeno y nutrientes a través de nuestras células y órganos.
Ohra es Agua Viva. Al tomarla, nos conectamos con la vida, nos recuerda que somos parte de la naturaleza, y esto nos permite reconocer y disfrutar nuestra conexión con Todos, con Todo. Cada sorbo de Ohra es un recordatorio de que nuestra salud y vitalidad dependen de nuestra armonía con la naturaleza y de la interconexión que compartimos con el universo.
